El paso del tiempo y la exposición crónica al sol provocan produce atrofia cutánea que afecta a la epidermis, la dermis, así como al tejido graso subcutáneo.
La luz intensa pulsada emite una banda ancha de luz de alta intensidad , que penetra en las capas más profundas de la piel, estimula la producción de colágeno y fibras elásticas, lo cual se refleja en la mejoría en la profundidad de las arrugas, luminosidad , afinamiento de la textura e hidratación de la piel. También es de utilidad para el aclaramiento o eliminación de las manchas oscuras y venitas y poros abiertos en la en la piel. Puede ser usada en cualquier parte del cuerpo, pero se indica con mayor frecuencia en El rostro, cuello, el escote y manos, que son las partes del cuerpo más afectadas por el paso del tiempo y la exposición solar.
La luz pulsada es un tratamiento no agresivo que permite realizar varias sesiones de aproximadamente 30 minutos. Se pueden realizar sesiones cada mes por tres meses 2 veces al año.